Cuando papá no está
Foto por Anna Catherine McGraw
Si tu padre no es parte de tu vida diaria, quizá te sientas huérfana
Por Hadassa Frías
Cada vez que se acerca el tercer domingo de junio, puede que te empieces a sentir triste pues esa celebración del día del padre no te trae el mínimo gozo. Tal vez tu papá se encuentra lejos, se fue hace poco o quizá nunca ha estado ahí para ti. Puede ser que te sientas abandonada o pienses que tuviste algo de culpa en la separación de tus padres.
Pero quiero compartirte algo que mi mamá me repitió incansablemente desde que tengo memoria: Dios es Padre y protector de los huérfanos (Salmos 68:5). Ella misma lo aprendió a corta edad al tener un padre terrenal ausente.
Si tu padre no es parte de tu vida diaria, quizá te sientas huérfana (que significa falto de algo, especialmente de amparo) y su ausencia en tu vida duele mucho. Pero eso no quiere decir que ese vacío no pueda ser llenado.
Dios es más que suficiente para suplir todas tus necesidades. Eres su hijita amada y Él es tu Papá (2 Corintios 6:18) que te protege, provee para ti, te abraza, te consuela y te sostiene en sus fuertes brazos para siempre (Deuteronomio 33:27).
Gran parte de nuestra identidad como chicas recae en lo que nuestros papás piensan de nosotras. Su aceptación es extremadamente importante para sentirnos dignas de ser amadas.
Pero, ¿sabes qué dice tu Papá de ti? En tiempos de oscuridad es fácil olvidarlo, pero permíteme recordarte algunas verdades:
Eres la niña de sus ojos (Zacarías 2:8).
No te condena (Romanos 8:1).
En Él eres sabia, recta, santa y redimida (1 Corintios 1:30).
Él te escogió como su hija (Efesios 1:5).
Eres su amada por siempre y nada ni nadie te podrá separar de su amor jamás (Romanos 8:38-39).
Él te hace suficiente (Colosenses 2:10).
Te ha hecho maravillosa (Salmos 139:14).
Por lo tanto, en este día del padre puedes estar segura de que, a pesar de los sentimientos agridulces, tu Papi está contigo siempre.
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