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Foto por Diana Gómez

Ilustrada por Frida García R.

¿Eres adicto a las redes sociales?

Por Marisol Quintero

¿Yo? ¿Adicta?

Seguramente no te consideras una adicta a las redes sociales, pero veamos qué significa la palabra adicción. La RAE la define como: «dependencia del consumo de alguna sustancia o de la práctica de una actividad» (Pinillos Psicología [Esp. 1975]).

La American Psychological Association dice que es un trastorno crónico y recurrente caracterizado por el consumo compulsivo de sustancias o la participación en actividades a pesar de sus consecuencias adversas. Implica una dependencia física y/o psicológica que afecta el funcionamiento social, laboral y personal del individuo. (American Psychological Association [APA], 2020).

Por todos lados escuchamos frases como: Tómale un screenshot. Dale like. Sígueme en mi Insta. ¿Has visto este Tik Tok? Hemos sido testigos de una evolución tecnológica, que trascendió a los colonos y nativos digitales, y que hoy representa una de las nuevas adicciones. Sí, así como lo oyes, hoy muchas personas son adictas a las pantallas y las imágenes, movimientos y sensaciones que producen.

Acompáñame para entender cómo se desarrolla nuestro cerebro, qué genera y por qué acudimos a las adicciones. Encontraremos cosas fascinantes.

Dos momentos claves en la vida

Cuando nacemos, nuestro cerebro está en pleno crecimiento y aprendizaje. Los primeros tres años de vida son cruciales porque es cuando cada neurona se cubre con una capa especial llamada mielina. Esto hace que los mensajes en nuestro cerebro viajen rápidamente, como si fueran en autopista, ¡y permite que las conexiones entre las células nerviosas sean súper rápidas!

En la adolescencia, hay otro boom de conexiones neuronales que también es muy importante para cómo nos desarrollamos. Estos dos momentos, cuando somos bebés y adolescentes, moldean cómo aprendemos, cómo nos relacionamos con los demás y cómo manejamos nuestras emociones. Por ello, la manera en que estimulemos el cerebro afectará positiva o negativamente nuestro desarrollo por la vida: aprendizaje cognitivo, social, emocional, etc.

¿Cómo afectan las pantallas?

Los primeros tres años de vida son muy importantes en nuestro cerebro, pues se generan los circuitos neuronales de la concentración contenida. La estimulación temprana ayudará a que el cerebro madure adecuadamente. Sin embargo, el uso de un dispositivo electrónico entorpecerá los aprendizajes futuros, que controlan los métodos tradicionales de enseñanza de la lectura, la escritura, y la concentración sostenida. Si un niño de esta edad tiene contacto con el dispositivo electrónico, tendrá dificultad para comunicarse e interactuar cara a cara, lo que le refugiará en el dispositivo y toda la estimulación auditiva y visual que este ofrece.

Una máquina maravillosa

El cerebro es una máquina maravillosa, objeto de estudio por la ciencia y que aún no termina de explorarse. No es común que pensemos en él. Casi siempre se hace énfasis en el cuidado del corazón, del colesterol, los triglicéridos, etc. pero nunca se nos habla de la importancia del cerebro.

Sin embargo, es un órgano irremplazable, que coordina todas las funciones de nuestro cuerpo, conscientes e inconscientes. Cada emoción que experimentamos se genera ahí, a través de lo que conocemos como neurotransmisores, que son sustancias químicas que llevan la información de una neurona a otra. Un ejemplo es la adrenalina que liberamos en situaciones de peligro. Nos hace más fuertes, más veloces y con mayor capacidad de respuesta. Por eso, cuando estás en tu casa y sale un ratón, gritas y de un brinco te subes a la mesa. Después del susto te preguntas cómo te subiste a ese lugar. la respuesta es que ¡liberaste adrenalina!

Así como la adrenalina, existen otros neurotransmisores conocidos como el «Cuarteto de la Felicidad»: la dopamina, la serotonina, la oxitocina y las endorfinas. Pero ¿por qué estamos hablando de esto? ¿qué no se iba a tratar de adicciones? ¡Claro! Pero para comprender las adicciones, necesitamos saber cómo funciona nuestro cerebro.

Analicemos al cuarteto

La oxitocina es como la «hormona del abrazo» o la «hormona del amor». ¿Sabías que esta hormona especial se activa cuando compartes un abrazo con tus seres queridos o cuando te sientes muy conectado con alguien? Fortalece tus lazos emocionales y te hace sentir más seguro de ti mismo. Pero espera, aquí está lo interesante: cuando falta en tu cuerpo, puede causar problemas como sentirte muy estresado o incluso perder el interés en cosas como el amor o el cariño. ¡Así que abraza mucho para mantener tu oxitocina en buen estado y sentirte genial!

Además, ¿sabías que la serotonina es como el jefe de tus emociones y sensaciones? Esta cosa increíble ayuda a controlar cómo te sientes. Si estás de buen humor, tranquilo y disfrutando de la vida, ¡es probable que la serotonina esté haciendo su trabajo! Además, ayuda a mantener a raya la agresividad y tiene mucho poder sobre cosas como el deseo, el hambre, el sueño y hasta la temperatura de tu cuerpo. ¡Pero espera! Aquí está lo interesante: cuando falta en tu cuerpo, puede causar algo que se llama depresión, que básicamente significa sentirte muy, muy triste por mucho tiempo.

Las endorfinas son los «héroes» naturales de tu cuerpo. Son como proteínas especiales que se parecen a ciertas sustancias que se encuentran en las drogas como la morfina o la heroína. ¿Sabías que estas endorfinas son tus aliadas? Ellas juegan un papel fundamental en cómo sientes el deseo y, además, son tus guerreras contra el dolor, cuando estás triste o cuando te lastimas. Y son clave en ayudarte en la concentración y los recuerdos. ¡Son como tus súper poderes naturales dentro de ti! 

Del «cuarteto de la felicidad» nos falta la dopamina, que hemos dejado al final, por lo relevante al tema que hoy nos compete. ¿Sabías que la dopamina es como el «químico de la recompensa»? Cuando logras algo que te propusiste o alcanzas una meta, la dopamina es la que te hace sentir esa sensación genial de felicidad y logro. ¡Es como el premio en tu mente por hacer algo increíble!

Esta cosita también te da ese impulso para buscar más cosas que te hagan sentir bien, como cuando quieres seguir jugando a tu videojuego favorito, ver Tik Toks, Reels, entrar a Instagram, o lograr un buen resultado en algo que te gusta.

Además, es como el jefe que controla cómo te sientes, cómo duermes y cómo te mueves. ¡Es una sustancia súper poderosa en tu cerebro que mantiene las cosas geniales y emocionantes! La dopamina está totalmente relacionada con la expectativa de algo bueno que va a pasar. 

Piensa en esto: cuando tienes hambre o sientes ganas de hacer algo emocionante, tu cerebro usa este neurotransmisor para recordarte cómo obtuviste esa sensación de placer antes y qué pasos debes seguir para conseguirla de nuevo. Por ejemplo, si te acuerdas de lo delicioso que estaba ese helado la última vez que lo comiste, ¡es gracias a este neurotransmisor que te ayuda a recordar y te empuja a buscarlo de nuevo para sentir esa misma felicidad! 

Ahora regresemos a las redes

Las redes sociales son generadoras de dopamina en nuestro cerebro, pero la dopamina es sumamente adictiva. Usar demasiado las redes sociales puede hacer que veamos la vida de una manera que no es totalmente real. ¿Alguna vez has sentido como si tuvieras una versión falsa de ti mismo en línea? A veces, pasar mucho tiempo en las redes sociales puede hacer que te sientas extraño o diferente de lo que eres en realidad. A esto se le llama despersonalización, y es como si perdieras un poco de conexión contigo mismo y con el mundo a tu alrededor.

Puede hacerte sentir como si estuvieras en un lugar extraño, como si el tiempo se detuviera o como si las cosas no fueran reales. Es importante estar consciente de cómo nos hacen sentir las redes sociales y equilibrar el tiempo que pasamos en línea con experiencias en el mundo real que nos hagan sentir más conectados y auténticos.

Jugar demasiado a los videojuegos o pasar tiempo excesivo en redes sociales puede afectar tu cerebro de una manera similar a como lo hacen ciertas adicciones, como el alcohol o la marihuana. Cuando te enganchas a esto, tu cerebro libera dopamina, que, como ya lo dijimos, te hace sentir bien. Esto puede crear una especie de «memoria de adicción», haciéndote querer pasar más tiempo en la red… enredado.

Cuando esto sucede, puedes empezar a tener problemas para pensar con claridad, recordar cosas y sentir que el tiempo pasa de manera extraña. Además, podrías sentirte más ansioso, triste o tener pensamientos obsesivos que te hagan preocuparte mucho. Algunas personas también experimentan sensaciones extrañas, como sentir que ya vivieron algo o que el tiempo pasa de forma diferente. Es importante equilibrar el tiempo que pasamos jugando con otras actividades que nos hagan sentir bien y nos mantengan conectados con el mundo real. Una adicción tiene cuatro elementos:

·  Fuerte deseo

·  Incapacidad para detener la conducta

·  Angustia emocional cuando no se realiza la actividad

·  Persistencia de la conducta

Los adictos a Internet tienden a formar una atadura emocional con otras personas on-line. En Internet, es fácil ocultar quiénes somos de verdad. Podemos esconder nuestro nombre, edad, aspecto físico y muchas cosas más. Algunos usuarios, especialmente aquellos que se sienten solos o inseguros en la vida real, aprovechan esa libertad para compartir sus sentimientos más profundos y secretos más oscuros. Esto puede hacer que sientan que tienen una conexión íntima, pero cuando la realidad les muestra que no pueden confiar tanto en esa comunidad anónima, puede causar mucha decepción y dolor. 

Usar demasiado la tecnología puede tener impactos serios en nuestra vida. Puede llevarnos a tener problemas como fumar o beber, afectar nuestro rendimiento en la escuela y hacer que nos sintamos mal emocionalmente. Cuando abusamos de la tecnología, como los videojuegos o redes sociales, podemos afectar a partes importantes de nuestro cerebro que nos ayudan a tomar buenas decisiones y controlar nuestras emociones. Todo esto puede hacer que nos sintamos confundidos, ansiosos y emocionalmente inestables. 

¿Algunas soluciones?

La terapia que se enfoca en trabajar en nuestros valores y encontrar un sentido en la vida, Logoterapia, puede ser útil para ayudarnos a superar estos problemas. Es importante encontrar un equilibrio saludable entre el tiempo que pasamos en línea y las actividades fuera de la pantalla que nos hacen sentir bien y conectados con la vida real.

Y lo más importante: somos seres tripartitos, con espíritu, alma y cuerpo. Dios nos creó y Él sabe cómo ayudarnos a fortalecer nuestro cuarteto de la felicidad.

¿Cómo puedo generar oxitocina de manera saludable?

·  ¡Abraza! Cuando te sientas solo y pienses que nadie quiere abrazarte, recuerda lo que dice el salmo 91:4: «Con sus plumas te cubrirá, y debajo de sus alas estarás seguro; escudo y adarga es su verdad». Dios tiene el poder de hacernos sentir abrazados a través de Su palabra.

·  Medita. Dios nos dice en el salmo 1:1-3 que somos bienaventurados cuando meditamos en Su palabra.

·  Piensa siempre positivo. Dios es nuestro creador. Él sabe cómo funciona nuestro pensamiento, y la mejor manera de cuidar de la mente está en Filipenses 4.8: «Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad».

¿Y la serotonina?

·  Sé agradecido, siempre, como dice 1 Tesalonicenses 5:18.

·  Resignifica hasta donde sea posible cada momento. El salmo 113:3 dice: «Desde el nacimiento del sol hasta donde se pone, sea alabado el nombre de Jehová».

·  Busca tranquilidad en la naturaleza y contempla las maravillas de Dios. Te puedes inspirar con el salmo 8.

·  Haz ejercicio constante.

·  Sé bondadoso. No olvides que el fruto del espíritu trae amor, gozo, paz, paciencia, bondad y muchas cosas más.

¿Cómo estimular las endorfinas?

·  No tomes nada personal.

·  Trabaja en equipo.

·  Ve películas o series, o lee libros que inspiren y busquen tu crecimiento personal… La Biblia es el libro más esperanzador.

La mejor manera de generar dopamina sanamente.

·  Cumple objetivos a corto plazo, Dios te dice en Proverbios 16:3: «Encomienda a Jehová tus obras, y tus pensamientos serán afirmados».

·  Celebra y reconoce tus logros. Dios nos dice en 1 Tesalonicenses 5:12-13: «Os rogamos, hermanos, que reconozcáis a los que trabajan entre vosotros, y os presiden en el Señor, y os amonestan; y que los tengáis en mucha estima y amor por causa de su obra. Tened paz entre vosotros».

·  Ríete lo más que puedas, incluso de ti mismo. Dios se goza de nuestra risa; Él nos diseñó, por lo que Proverbios 17:22 dice: «El corazón alegre constituye buen remedio; Mas el espíritu triste seca los huesos».

·  Busca tiempo al aire libre. Duerme al menos ocho horas diarias. Haz ejercicio al sol. La Biblia no habla sobre hacer ejercicio al sol, pero si nos dice en 1 Corintios 9:24-26: «¿No sabéis que los que corren en el estadio, todos a la verdad corren, pero uno solo se lleva el premio? Corred de tal manera que lo obtengáis. Todo aquel que lucha, de todo se abstiene; ellos, a la verdad, para recibir una corona corruptible, pero nosotros, una incorruptible».

Las adicciones pueden dañar todo lo que somos: cuerpo, mente y emociones. Dios nos hizo increíblemente especiales y nos dio un cerebro asombroso para que podamos vivir al máximo. Ahora que entiendes cómo las redes sociales pueden convertirse en una adicción es importante luchar para mantener tu mente libre y saludable. La Biblia es como un gran amigo que nos ayuda en momentos difíciles, pues en ella conocerás a Jesucristo, ¡una compañía  para toda la vida!


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