Una paloma rebelde (parte 4)
Profundiza sobre la historia de esta paloma que fue a dar al estómago de un pez
Por Julia Harris
Lee Jonás 2:1-10
Jonás describe lo que sintió estando dentro del pez. Dice: la corriente me rodeó, las salvajes y tempestuosas olas me cubrieron, las algas se enredaron en mi cabeza, sentí hundirme hasta quedar preso en el fondo de la tierra.
Además, este tiempo fue de un profundo despertar espiritual. Estaba angustiado, pero clamó a Dios con la seguridad de que sería oído y que Dios lo iba a salvar.
En nuestra vida pasa lo mismo, como Jonás necesitamos reconocer nuestra necesidad de Dios y clamar a Él con la seguridad de que nos va a salvar, esto es fe.
Jonás le hace una promesa a Dios: «Pagaré lo que prometí». El día de hoy Dios no nos pide que le hagamos promesas, sino algo más profundo, nos pide un compromiso diario. El Señor Jesús dijo: «Si alguno de ustedes quiere ser mi seguidor, tiene que abandonar su manera egoísta de vivir, tomar su cruz cada día y seguirme» (Lucas 9:23).
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